Una luz breve y tenue rompe la obscuridad de la habitación, mientras constante y rítmicamente una mecedora se mueve… Y al silencio la quietud del espacio conmueve.
En la ventana del pequeño cuarto, se percibe una mañana recién nacida, que valerosa interrumpe de la noche sus inquietudes y melancolías. Y graciosas miles de motitas de polvo bailando están en el aire, en un motín de rebeldía de la vida y sus donaires.
Una cama, un ropero y una cuna se divisan entre luces y penumbras en la humilde habitación. Y una mujer mantillas blancas como armiño con paciencia y cariño teje. En su semblante se dibuja la paz de un ser que con amor y ternura a los suyos protegé.
A lo lejos los pajaritos cantan con alegría alabando al nuevo día. En el corral, los becerritos a sus madres exigen leche. En medio de las ovejas, los pollitos y patitos muy juntitos se cobijan encontrando albergue.
…………………Y en la cuna… en la cuna una promesa nueva duerme.
~NEM
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©2011 Madrigal
Poema Registrado. Todos los derechos reservados.
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