Erase una vez un mundo
Sin sol, sin luna,
Donde las almas deambulan
Sin fe, sin rumbo
Dama de noche, de bares y esquinas
Que vendes tu alma por unas monedas
En penas, angustias tropiezas y ruedas
Y por un amor esperas, mendigas
Vestida de entalles de poco valor
En tu maquillaje guardas tu dolor
Creatura inmunda mereces desprecio
Incluso quien sacia su sed en tu cuerpo
Hoteles baratos con sábanas turbias
Testigos furtivos de tus desventuras
De caricias compradas que huelen a hiel
Que carcome, corroe tu lánguida piel
Se nota en tus ojos tan gran amargura
Que con falsas sonrisas tu disimulas
Me partes el alma ilusa creatura
Al verte pérdida entre tus angustias
De pronto se mira la niña que un día
soñando quería ser una maestra
O ama de casa con hijos, familia
Cuidando el hogar con gran entereza
Será que de niña amor no tuviste
Hoy buscas tan solo llamar atención
Será que queriendo ser libre huiste
del maltrato, abuso y aflicción
Tu gran hermosura aun se divisa
En medio del llanto de tu profesión
Aun cuando tu piel refleja fatiga
Tu alma la llevo en el corazón
~NEM
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©2011 Madrigal
Poema Registrado. Todos los derechos reservados.
Se Permite la reproducción citando al autor.
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