Se desgranan en mi ventana
Horas tristes, ya marcadas
De un tiempo que se marchita
Se aleja, con calma infinita
Llevándose mis mañanas
Desde este umbral solitario
Veo a la juvenil promesa
De los enamorados
Que aún su futuro no empaña
La tristeza de los años
Con mis ojos ya cansados
De mirar lo cotidiano
Soy incognito testigo
Que dé tiempo a tiempo olvido
Anhelos y sueños pasados
En la brevedad de este espacio
Desde mi balcón entran
Las alegrías y sonrisas
De futuras primaveras
Que aligeran a mi ocaso
A través de estos vidrios
Otros sueños hago míos
Sin que nadie se dé cuenta
De esta ladrona de quimeras
Que de anhelos se alimenta
Otros sueños hago míos
Sin que nadie se dé cuenta
De esta ladrona de quimeras
Que de anhelos se alimenta
Y es esta melancolía
De mi ventana envejecida
En la que se refleja
La verdad y la ironía
Del final de mis días
~NEM
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©2011 Madrigal
Poema Registrado. Todos los derechos reservados.
Se Permite la reproducción citando al autor.
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